domingo, 18 de febrero de 2018

COAG-Jaén muestra su preocupación por el peligro de que los algodoneros pierdan las ayudas agroambientales si no pueden sembrar por la sequía.

Plantaciones de algodón en la Vega del Salado de Lopera. Foto: Antonio Marín.
COAG-Jaén muestra6 su preocupación por el peligro que podría suponer que los algodoneros no siembren esta campaña debido a la falta de agua, lo que llevaría aparejado el incumplimiento de la normativa de 2015 y la pérdida de las ayudas agroambientales de los años 2015 y 2016, además de no percibir la de este año.
Según normativa de 2015, se permite no hacer siembra de algodón siempre y cuando se introduzcan cultivos compatibles con el algodón. Pero con la sequía que asola la provincia, en la zona del Rumblar es muy probable que no haya agua para sembrar algodón esta campaña, pero tampoco se podrá sembrar ningún cultivo. La única solución es que se deje la tierra en barbecho, aunque esta opción no es compatible con la normativa vigente. En este caso, los algodoneros no cumplirían con la Orden actual, un incumplimiento que es considerado como grave. La consecuencia sería no solo que pudieran ser excluidos del régimen y no perciban las ayudas del año actual, sino tengan que devolver ayudas anteriores de 2015 y 2016.
Ante la situación, COAG-Jaén plantea a la Administración que se tenga en cuenta el artículo 11 de la Orden de Ayudas de Agroambientales para que la sequía sea considerada una causa de fuerza mayor y que los algodoneros puedan dejar la tierra en barbecho sin percibir la ayuda correspondiente a este año, pero sin que tengan que reintegrar las percibidas en años anteriores. Es decir, que no cobren la subvención, pero tampoco se les penalice por una causa ajena al algodonero.