Las organizaciones agrarias Coag y Asaja hablan de pérdidas de hasta
un 20% de la cosecha de aceituna. La lluvia ha afectado a los olivares de aceituna de molino, especialmente en Jaén y Córdoba, de forma que "la aceituna ha caído al suelo, lo cual hace mermar su calidad, pero además la campaña de recogida se está retrasando más de la cuenta e incluso la cosecha se ha paralizado".
Los olivareros ya no sólo deben temer el precio del aceite de oliva, que se cotiza a 1,95 euros el kilo durante la última semana, sino que ahora la "gran amenaza" a la que se enfrentan es la lluvia, que en tan sólo unas semanas se ha convertido "en el principal quebradero de cabeza de los agricultores".Ello quiere decir que para cuando las cuadrillas puedan acudir al tajo mucha aceituna estará hincada en el suelo y con mucha humedad, por lo que será "gran cantidad la que no se pueda ni coger para llevarla a la almazara".
Así, a la pérdida de producción que están padeciendo, los agricultores deben unir además el aumento del coste en la recolección, ya que deberán acometer más gastos ahora que la mitad de la cosecha está en el suelo, ya que la recolección será más lenta y deberán emplear más jornales.
Fuente: Europa Press.