Lopera cuenta con una singular tradición musical que se manifiesta cada año de forma espontánea en la noche del jueves previo a la Feria de los Cristos y cuyos protagonistas son los jóvenes del pueblo que, convocados en tunas o rodallas, se reúnen con sus capas repletas de cintas y con sus instrumentos musicales para cantarle bajo los balcones a la reina y damas de honor de las fiestas, en una tradición que se remonta a finales de los años sesenta.
Los yogurines, La Rondalla, Los Peques y la Tuna de Lopera serán los nombres de las variopintas agrupaciones que esta noche deleitarán a las jóvenes loperanas. Todos han pasado gran parte del verano preparando el repertorio con el que sorprender a tan exigente auditorio.
El ambiente nocturno de este día se impregna de canciones tan populares como Española, Clavelitos, Noche de Ronda, Las cintas de mi capa, etc. Hoy jueves las bandurrias, laúdes, maracas, panderetas, guitarras, unidas a las voces de los jóvenes tunantes, hacen de esta noche un acontecimiento especial que atrae a numerosos visitantes.