El Convenio del Campo se atasca a pocos días de que comience la campaña de recolección de la aceituna. Hasta el momento, los trabajadores no saben cuánto cobrarán, ya que la norma que regula el jornal mínimo ha caducado y las personas que negocian su actualización no se ponen de acuerdo.
En la última reunión los sindicatos propusieron una subida del 2% y el IPC, lo que representa un 4,8 por ciento más que el año pasado. En cambio, los representantes de los agricultores dicen que hay que pagar igual que el año pasado, es decir, quieren congelar el salario en un cero por ciento aprovechando la coyuntura de crisis actual en el sector. De ahí que la cita acabara sin entendimiento.
Después de cuatro reuniones, aún no hay acuerdo y todo apunta a que la campaña de recogida comenzará sin un precio fijado para los jornales. La próxima reunión está prevista para el 23 de noviembre. La negociación del convenio colectivo del campo es el más importante de la provincia al afectar a unos 100.000 trabajadores agrícolas.
Fuente: EFE.