La pregonera
recordó en su discurso retazos de su infancia y juventud vividos
intensamente en torno a la feria de su pueblo, sin olvidar las fiestas y
costumbres locales.
Volvió atrás en el
pasado para recordar aquellos días de su tierna niñez vivida junto a las Bodegas Herruzo, cuando llegaban los tractores llenos de racimos de uva y ella ansiaba coger uno de ellos para inaugurar la campaña.
Realizó un repaso por los principales artistas loperanos y quiso destacar los principales monumentos históricos con que cuenta Lopera: Castillo, Iglesia, Tercia, Ayuntamiento, Casa del Judío, colegio, casas de los maestros, etc.
También revivió aquel año en que fue nombrada Reina de la Feria y tuvo que lidiar con una gran responsabilidad. No faltaron los recuerdos a las tunas y a aquellos maestros que a lo largo de su vida la han formado en materia educativa.
Realizó un repaso por los principales artistas loperanos y quiso destacar los principales monumentos históricos con que cuenta Lopera: Castillo, Iglesia, Tercia, Ayuntamiento, Casa del Judío, colegio, casas de los maestros, etc.
También revivió aquel año en que fue nombrada Reina de la Feria y tuvo que lidiar con una gran responsabilidad. No faltaron los recuerdos a las tunas y a aquellos maestros que a lo largo de su vida la han formado en materia educativa.
En definitiva, su
pregón fue costumbrista y estuvo impregnado de fuertes matices
nostálgicos. Su juventud y niñez fueron recordados con gran añoranza por el largo tiempo transcurrido.
Tras el pregón se llevó a cabo la coronación de las Reinas Mayor e Infantil de las Fiestas. Como Reina Mayor de la feria resultó elegida Cristina Domenech Ruíz y como Reina Infantil Julia Lara Haro.