Juan Luis Ávila (COAG), Luis Carlos Valero (Asaja), Cristóbal Cano (UPA), Higinio Castellano (Cooperativas Agro-alimentarias). Foto: COAG. |
Vehículos
de 13 municipios de la zona de la Sierra de Segura de Jaén han recorrido esta
mañana las carreteras de la comarca hasta llegar a Puente de Génave exigiendo
una defensa más contundente del olivar en pendiente y con altos costes de la
comarca, más vulnerable y, por ende, necesitado de apoyos, pero de gran riqueza
medioambiental, social y cultural y que garantiza la fijación de la población
al territorio.
Varios
cientos de vehículos han salido a las 8,30 horas de las localidades de Villanueva
del Arzobispo, Arroyo del Ojanco, Beas de Segura, Benatae, Génave, Hornos,
Orcera, Puente de Génave, La Puerta de Segura, Santiago Pontones, Segura de la
Sierra, Siles, Torres de Albanchez y Villarrodrigo hasta llegar poco antes de
las 11,00 al punto de encuentro situado en Puente de Génave.
Al
llegar allí los representantes de las tres organizaciones profesionales
agrarias ASAJA, COAG y UPA y Cooperativas Agro-Alimentarias, convocantes de la
caravana, han recibido la comunicación urgente de que había una alerta
sanitaria por COVID-19, por lo que por responsabilidad se ha decidido adelantar
la lectura del manifiesto y disolver la movilización.
El
manifiesto, leído por Manuel Pajarón, persona de reconocido prestigio en la
zona por su lucha del olivar ecológico y de la sierra, que fue durante muchos
años director de la Oficina Comarcal Agraria (OCA), ha recordado que hace cinco
meses todo el olivar de España se puso en pie para pedir un precio justo para
un olivar vivo.
El
olivar tradicional de Sierra, “el olivar de los troncos gordos que trepa por
los cerros, este olivar que ha sido la base de la economía, del paisaje y la
cultura de nuestros pueblos”, se ahoga, se asfixia ha recordado en la
intervención.
Un
olivar que no puede competir ni siquiera con los olivares tradicionales de la
campiña, por costes y menor producción, pero que busca la superviviencia de la
que dependen también los pueblos de la zona.
De ahí
que en el manifiesto se haya hecho hincapié en que si el olivar tradicional
quiere sobrevivir no puede andar por los mismos caminos que el resto, y el
primer paso es el que se ha dado hoy saliendo del letargo. “Tenemos un problema
en común con el resto” pero en muchas ocasiones las soluciones del resto del
sector no son las mejores para el olivar de sierra, “necesitamos un chorro de
oxigeno ya” han asegurado.
Y han
pedido “apoyo, sin ambigüedades, de las administraciones públicas y de las
organizaciones profesionales agrarias y de las cooperativas, el de toda la
población serrana y de otros territorios con olivar tradicional de sierra de
España, que son muchos”.
Y es
que los problemas que llevaron a sacar los tractores a las carreteras
persisten, y en muchos casos se han visto agravados por los efectos del
COVID-19 en la economía. Este tipo de movilizaciones, condicionadas por la
pandemia, que continúa presente entre nosotros, quieren ser una nueva llamada
de atención que mueva a la actuación a las autoridades andaluzas, españolas y
europeas ante la grave situación que se vive en el olivar.