“Son datos realistas que lanzan un mensaje de tranquilidad a los mercados, lo que debe reflejarse en los precios en origen. Con este aforo presentado creemos que la estabilización de los precios tiene que mantenerse por encima de los costes de producción en el olivar tradicional, lo que supone una noticia muy importante para el sector. Sin embargo, el aforo, como viene siendo habitual todos los años, está supeditado a la climatología. Creemos peligroso el rendimiento previsto de un 21,5% porque todo va a depender de las lluvias que puedan producirse en otoño”, concreta Cristóbal Cano.
El notable incremento del consumo es una de las mejores noticias que puede recibir el sector en estos momentos, sobre todo después de estas dos últimas campañas de comercialización que han batido récords. “Ahora más que nunca, el sector olivarero tiene en sus manos el futuro del aceite de oliva. Ya estamos viendo que los precios por encima de los costes de producción en el olivar tradicional no perjudican el consumo.
Los ciudadanos, tanto en España como en terceros países, demandan un aceite de la máxima calidad y están dispuestos a pagar por él un precio justo. Durante dos años se ha demostrado que el consumo no se resiente a unos precios en origen que nos permitan vivir dignamente de nuestro trabajo a los olivareros. Ahora es el momento de dar estabilidad con la aplicación de las normativas que tenemos sobre la mesa, la Ley de la Cadena Alimentaria, el decreto de calidad o el mecanismo de autorregulación. Pero necesitamos que las administraciones sean valientes y terminen de erradicar la venta a pérdidas y el uso del aceite como producto reclamo para que los especuladores, definitivamente, no tengan la voz cantante”, asegura Cristóbal Cano.