La consejera de Salud y Consumo, Catalina García, junto a la delegada territorial, Elena González, y miembros del equipo directivo del Hospital Universitario de Jaén, ha visitado estas dependencias que cuentan con 10 boxes y uno más de aislamiento, en 233 metros cuadrados, y en los que la Administración pública ha invertido 318.558 euros en obras para la mejora del sistema de ventilación y climatización.
La Unidad de Recuperación Postanestésica (URPA) es una unidad donde ingresan todos los pacientes que han sido sometidos a una intervención quirúrgica con anestesia general, regional o sedación que precise ingreso hospitalario, y que no necesiten ser atendidos en la Unidad de Cuidados Intensivos. En estas dependencias los pacientes reciben cuidados postoperatorios, tanto de monitorización como de tratamiento hasta su traslado posterior a las plantas de hospitalización.
En la URPA se desarrolla todo el proceso de recuperación gradual de las funciones orgánicas y reflejos vitales tras recibir el tratamiento anestésico necesario para la intervención. En esta unidad, los profesionales vigilan los signos vitales de los pacientes y los acompañan hasta que se trasladan a su habitación, además de recibir asistencia que requiera la rápida actuación de profesionales sanitarios en caso de ser necesario.
La Unidad depende funcionalmente del servicio de Anestesiología y Reanimación y es atendida las 24 horas del día, 365 días del año por anestesiólogos, así como enfermeros con formación específica y TCAEs, además de celadores y personal administrativo.
Las obras desarrolladas en este espacio sanitario se suman a otras que se realizan en la actualidad, como las que se ultiman en el edificio de la antigua Escuela de Enfermeras y de reforma de las consultas externas de Urología, sala de Extracciones o consultas de Traumatología en el Hospital Materno-Infantil.
“A estas mejoras y humanización de espacios se suman nuevos equipos tecnológicos que recientemente se han incorporado a nuestro hospital de referencia, como el robot quirúrgico Da Vinci, o la pronta instalación del nuevo PET-TAC, que suponen una mejora sin precedentes en el tratamiento y diagnóstico de los pacientes”, ha concluido Catalina García.