viernes, 12 de octubre de 2007

La Ley de la Memoria Histórica prevé la retirada de subvenciones públicas a quien no elimine los símbolos franquistas.


Las negociaciones parlamentarias para modificar el proyecto de ley conocido como de Memoria Histórica han permitido incluir un artículo en el que se abre la vía de que las administraciones públicas puedan retirar subvenciones a quienes no retiren símbolos que glosen el bando nacional, la guerra civil y la dictadura franquista.
La redacción pactada por PSOE, IU-ICV y PNV para ese artículo 15 señala que "las administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura". En el texto, recogido por Europa Press, se establece como excepción a esa norma "cuando las menciones sean de estricto recuerdo privado sin exaltación de los enfrentados o cuando concurran razones artísticas y arquitectónicas protegidas por la ley".
Para quien no cumpla con esa retirada de símbolos, la nueva redacción prevé que las administraciones puedan retirar las subvenciones o ayudas públicas, incluso las que reciben propietarios privados. Además, y a los efectos de adoptar esas medidas oportunas para retirar símbolos, se señala que "el Gobierno colaborará con las comunidades autónomas y las entidades locales en la elaboración de un catálogo de vestigios relativos a la Guerra Civil y la Dictadura".
En Lopera existe en la carretera de Porcuna, en el lugar conocido como Puente del Ahorcado, un monumento en recuerdo a las víctimas del bando ganador de la guerra, que podría entrar en colisión con este artículo 15 del proyecto de ley de la Memoria Histórica. Asimismo, en Lopera existen calles que recuerdan a alcaldes, curas y gobernadores civiles del régimen franquista.