El partido comenzó muy bien para el Lopera, ya que a los cinco minutos ya ganaba por 1-0 gracias a una gran acción de Zapa, que realizó un buen pase en profundidad hacia Diego Gutiérrez para que éste superara al portero en su salida con un fuerte disparo cruzado.
Pero la alegría duró pocos minutos, pues poco tiempo después el equipo visitante acortó distancias a través de un certero remate a portería. A continuación, el Lopera pudo adelantarse a través de una buena combinación entre Zapa y Narria, pero éste último no llegó a tocar la pelota cuando estaba en la boca de gol. No llegó al esférico por unos centímetros.
El Lopera se gustaba y otro remate de cabeza de Zapa en un saque de esquina estuvo a punto de entrar por la misma escuadra, pero el cancerbero lo evitó con una gran estirada. Con el resultado de empate a un tanto se llegó al descanso.
Tras la reanudación el Lopera salió más enchufado y ponía en cerco la portería contraria. Fruto de su perseverancia en ataque llegó un gol desafortunado para el Fuensanta, ya que un defensa remató de cabeza en su área con tan mala fortuna que el balón se introdujo en su propia portería.
Entonces el entrenador local decidió sacar a Pacheco para refrescar la línea medular y su entrada al campo fue providencial, ya que a los pocos minutos este jugador materializó un gran gol al agarrar un zambombazo desde una distancia lejana que sorprendió por alto al meta visitante. La veteranía es un grado.
Pero el Lopera no podía respirar tranquilo. En un desbarajuste defensivo de los locales el Fuensanta anotó su segundo gol y ponía el temor en la grada, pero Juanma Cruz anotó el gol de la tranquilidad con un soberbio remate en el interior del área que puso las cosas en su sitio.