Calle Humilladero, en Lopera. |
En los últimos días la localidad de Lopera ha sufrido unas temperaturas que han superado los 30 grados, algo atípico para principios del mes de mayo, ya que todavía no ha llegado el verano.
Los principales afectados por este repentino calor casi estival son los alérgicos, ya que el sol ayuda a la floración del olivo y a una mayor concentración de polen en la atmósfera.
Sin embargo, aún es primavera y el tiempo puede cambiar. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) pronostica un descenso en las temperaturas a partir de este miércoles.
Para la Romería de San Isidro, que comienza el próximo viernes, hará buen tiempo en Lopera y el sol brillará durante los tres días de fiesta.