La gente se ha echado a la calle para disfrutar de las procesiones. |
El
tiempo no siempre corre en contra. Para el sector turístico este año el
buen tiempo ha supuesto un alivio, una recompensa para los negocios loperanos. La combinación de vacaciones y Semana Santa ha tenido unas perspectivas muy buenas.
Desde el Viernes de Dolores al Domingo de Resurrección ha imperado el sol y las buenas temperaturas. Los cofrades han podido desfilar en esta Semana Santa y los hosteleros reconocen que estos días han sido buenos.