domingo, 11 de octubre de 2020

El uso del móvil al volante sigue siendo la distracción más frecuente mientras se conduce.

Un vehículo circula por la carretera de Lopera a Porcuna. Foto: Antonio Marín.

El estudio “Smartphones: el impacto de la adicción al móvil en los accidentes de tráfico”, realizado por la Fundación Línea Directa en colaboración con el Instituto Universitario de Investigación de Tránsito y Seguridad Vial de la Universidad de Valencia (INTRAS), ha hecho saltar todas las alarmas.

El informe, que estima por primera vez el número de fallecidos y de accidentes debidos al uso indebido del móvil, concluye que este mal hábito habría podido causar la muerte de 390 personas al año.

Estas cifras convierten el uso del Smartphone en una de las principales causas de mortalidad en carretera, a la altura del exceso de velocidad o del consumo del alcohol. De hecho, la distracción con el móvil causaría cada año más del 20% del total de los fallecidos en accidente de tráfico y casi 8.000 accidentes con víctimas.

Pese a las campañas de sensibilización, el uso del móvil entre los automovilistas está más extendido de lo que se cree. De hecho, 13 millones de conductores, es decir, uno de cada dos, aseguran utilizar el móvil mientras llevan el vehículo y unos 600.000 se ven a sí mismos como “auténticos adictos al móvil” y reconocen “que no pueden dejar de mirarlo” mientras están al volante.

El informe, que se completa con más de 1.700 entrevistas a conductores, aporta otro dato preocupante: casi 2 millones de automovilistas (7%), admiten haberse hecho “selfies” conduciendo; 2,3 millones (9%) aseguran haber interactuado en Redes Sociales mientras conducían y casi 10 millones confiesan poner mensajes en WhatsApp estando al volante (37%).