“Las ayudas al estudio son una de las principales herramientas para garantizar la igualdad en el acceso a la educación y una de las políticas fundamentales para el Gobierno de España”, ha explicado. “Ningún estudiante debe abandonar sus estudios por motivos económicos, porque es el camino más directo para asegurar la cohesión social, la equidad y la igualdad de oportunidades”, ha agregado.
En concreto, durante el curso que ahora acaba de terminar, casi 16.000 estudiantes recibieron una beca en la provincia, de los que 6.100 son alumnos y alumnos de la Universidad de Jaén, y el resto cursa sus estudios en Bachillerato y Formación Profesional. “La previsión es que las cifras de beneficiarios con las becas en la convocatoria 2022-2023 sean similares o ligeramente superiores a las de este ejercicio, ya que hay se ha producido un incremento de la partida presupuestaria y, también, un aumento de las peticiones”. Así, por ejemplo, la Universidad de Jaén(UJA) ha recibido un 9.261 solicitudes de beca del régimen general para el curso 2022-2023 del Ministerio de Educación y Formación Profesional, lo que supone 1.656 solicitudes más que en el curso 2021-2022, según ha recordado Catalina Madueño.
La subdelegada ha especificado que, en los últimos cinco años, el presupuesto destinado por el Gobierno de España a las ayudas al estudio ha aumentado un 45%: de 1.472 millones en 2017-2018 a 2.134 millones en 2022-2023”. “El Ejecutivo de Pedro Sánchez asumió en 2018 un compromiso firme con la dimensión social de la educación y con el impulso de una política de becas que garantice que ningún estudiante abandone sus estudios postobligatorios por motivos económicos. El objetivo es seguir aumentando las cuantías para mejorar la equidad e inclusividad de nuestro sistema y para evitar que ningún alumno abandone sus estudios por razones económicas”, ha analizado la subdelegada.
La representante del Ejecutivo ha explicado que se trata de una
inversión que, al igual que sucedió en la convocatoria anterior, servirá
para cubrir la entrada de nuevos becarios con motivo de la caída de las
rentas derivada de la pandemia.
La novedad más importante de la convocatoria 2022-2023 es el adelanto de los plazos de solicitud y comunicación de las becas, que permitirá a los estudiantes saber antes del periodo de matriculación si cumplen con los requisitos económicos para recibir estas ayudas, reduciendo así su incertidumbre.
De hecho, los plazos se han adelantado cuatro meses, de
modo que el periodo de solicitud de becas se abrió el pasado mes de
marzo y no en julio o agosto como venía siendo habitual.
Además, la convocatoria para el próximo curso en estudios universitarios
incluye la reducción de la calificación requerida para la obtención de
una beca para cursar másteres no habilitantes. Bastará una nota media de
cinco puntos para la obtención de dicha beca en lugar de siete puntos.