Por provincias, en 2022 han recibido estos fondos 14 de Almería, 6 de Cádiz, 12 de Córdoba, 27 de Granada, 11 de Huelva, 17 de Jaén, 16 de Málaga y 13 de Sevilla.
Así, los ayuntamientos beneficiarios han destinado estos recursos a rehabilitar antiguas casas de maestros y médicos para su explotación como alojamiento rural o naves para ponerlas a disposición de emprendedores locales, a equipar parques infantiles o espacios socioculturales y deportivos para los vecinos, a comprar camiones para servicios de limpieza y mantenimiento o a reformar instalaciones municipales donde se prestan servicios públicos.
Estas ayudas se conceden en régimen de concurrencia competitiva y entre los criterios del baremo se tiene en cuenta la densidad de población, el crecimiento vegetativo de los últimos diez años o el índice de envejecimiento, además de los habituales en este tipo de convocatorias como la tasa de paro, el número de habitantes o los ingresos de la entidad local.
Es un ejemplo del compromiso de la Junta con los municipios más pequeños y el reto demográfico. Andalucía aún está a tiempo de frenar la despoblación que afecta sobre todo a comarcas de sierra e interior como las Alpujarras en Granada y Almería, la Axarquía malagueña, Los Pedroches en Córdoba, el Andévalo y la Sierra de Huelva, el interior de Jaén, la Sierra Morena de Sevilla o algunos municipios serranos de Cádiz.
La pandemia ha puesto en valor la vida rural y el auge de sectores como el turismo de naturaleza y la agricultura y ganadería ecológicas ofrecen grandes oportunidades de empleo. El teletrabajo, que ha venido para quedarse, y las nuevas tecnologías facilitan poder desarrollar una actividad desde cualquier sitio. Pero para ello hay que ayudar a las entidades locales a dotarse de buenas infraestructuras y equipamientos y la Junta aporta recursos para contribuir a ello, dentro del marco de la cooperación con el municipalismo.