martes, 20 de octubre de 2015

El Hospital Comarcal de Andújar incluye productos saludables en menús y máquinas expendedoras.

Máquina expendedora en el Hospital de Andújar.
Los hospitales de la Agencia Sanitaria Alto Guadalquivir -los comarcales de Andújar y Montilla, así como los de Alta Resolución de Sierra de Segura, Alcaudete y Alcalá la Real, en Jaén, y Puente Genil y Valle del Guadiato, en Córdoba- han comenzado a desarrollar un proyecto a través del cual están poniendo a disposición de pacientes, familiares y profesionales más alimentos saludables en sus cafeterías y las máquinas expendedoras ubicadas en distintas zonas de los hospitales.  
El objetivo de esta acción es promover la adquisición de hábitos de vida saludables entre su ciudadanía y contribuir a prevenir la obesidad desde otras líneas de actuación dentro del hospital, uniéndose así al trabajo que ya efectúan los profesionales sanitarios en su ámbito asistencial diario.
Según apunta el director gerente de la Agencia Sanitaria Alto Guadalquivir, Alfonso Gámez, “la obesidad es una de las lacras de la sociedad actual y el motivo de gran parte de las enfermedades crónicas. El factor más importante que la provoca es la mala alimentación basada en la falta de nutrientes, el exceso de grasas y el abuso de comidas precocinadas, entre otros, a lo que se une la falta de ejercicio y actividad física, que contribuye a que no se quemen calorías necesarias. De ahí que desde nuestros centros queramos proporcionar opciones de alimentación saludables para fomentar un estilo de vida más sano entre nuestros usuarios y que aprovechemos el Día Mundial de la Alimentación, que se celebró el pasado viernes, para darle mayor repercusión”.
Este proyecto, que ha terminado de implementarse en septiembre, aglutina tres líneas de acción prioritarias. Una de ellas es la posibilidad de elegir en la cafetería del centro un desayuno saludable, que consiste en adquirir una pieza de fruta por tan sólo 0,25 euros más de precio total del mismo, y así poder consumirla a media mañana, incorporando parte de las vitaminas y la fibra que requiere una dieta diaria equilibrada.
Otra de las acciones ha sido incluir en las máquinas de vending que están repartidas en diversas áreas hospitalarias bandejas con alimentos saludables. Éstas, que están identificadas de forma distinta para diferenciarlas del resto, contienen productos con bajo contenido en azúcares, integrales, ecológicos o de reducido contenido en grasas saturadas.
La tercera línea de trabajo viene marcada por los menús saludables que sirven las cafeterías de los centros. En este sentido, además de la oferta habitual de platos, se le suma un menú que incluye ensalada o verdura de primero, y pescado o carne a la plancha de segundo, así como una fruta o yogurt desnatado de postre.
Del mismo modo, también se presta especial atención a aquellas personas que padezcan algún tipo de alergia o intolerancia a ciertos alimentos, como los celíacos, los intolerantes a la lactosa o al huevo, entre otros, facilitándoles una oferta alimenticia que puedan consumir dentro del recinto hospitalario.
Los hospitales de la Agencia Sanitaria Alto Guadalquivir se unen con este proyecto a la tendencia de alimentación saludable en cafeterías y máquinas de vending, experiencia más desarrollada en otros ámbitos como el de las grandes superficies comerciales o centros educativos, pero aún poco implantadas en hospitales.
“Somos conscientes de nuestro papel como agentes de salud. -afirma Gámez-, y por ello debemos buscar todos aquellos campos de acción que complementen nuestra actividad sanitaria para conseguir a medio y largo plazo contribuir en la creación de una sociedad más sana”. 
Esta no es la primera práctica que los hospitales de la Agencia Sanitaria Alto Guadalquivir ponen en marcha en relación a la alimentación saludable. Entre los años 2011 y 2012 se llevaron a cabo dos campañas. Una de ellas iba dirigida a la prevención de la obesidad infantil y se denominaba ‘Con los más pequeños, pon salud en el plato’, y la otra, para el público en general, se llamó ‘Vive sano, se feliz’.
Ambas desarrollaron acciones internas y externas de comunicación y participación ciudadana y pretendían concienciar a padres, madres, educadores, usuarios y sus familias de que merece la pena que cuiden de su salud, porque conseguirán una mejor calidad de vida, disminuyendo la probabilidad de sufrir enfermedades, y aumentarán su nivel de felicidad al seguir unos hábitos de vida saludables.
Asimismo, anualmente los centros hospitalarios colaboran con acciones de participación ciudadana que fomentan la actividad física, el deporte y la alimentación saludable como los ejes para llevar una vida sana.