El acto estuvo encabezado por Enrique Santiago, diputado en el Congreso por Córdoba, portavoz de IU y secretario general del Partido Comunista de España (PCE), quien advirtió que “si seguimos entregando tierras fértiles a intereses especulativos, Andalucía perderá su capacidad de alimentar y sostener a su población”. Santiago anunció que IU-Sumar seguirá impulsando iniciativas legislativas que limiten el cambio de uso del suelo agrícola, regulen la expansión de megaplantas solares y garanticen una gestión pública y sostenible del agua. “Desde Sumar vamos a seguir peleando, con la aritmética parlamentaria que tenemos, para que el campo no se convierta en un decorado para macroproyectos mientras se expulsa a quien lo trabaja”, afirmó el diputado.
Presencia de afectados y apoyo institucional.
En el encuentro participaron representantes de la plataforma Stop Megaplantas Solares en el Alto Guadalquivir, agricultores afectados y preocupados por la proliferación de instalaciones energéticas en zonas de alto valor agronómico. Asistieron también los concejales de IU de Lopera, Montoro, Montilla, Pedro Abad, Pozoblanco y Villa del Río entre otras localidades, junto a los diputados del grupo de IU en la Diputación de Córdoba, Irene Ruiz, José Manuel Cobo y el parlamentario andaluz José Manuel Gómez Jurado.
Desde Lopera, los ediles Francisco Jesús Sevilla y Pedro Ruiz destacaron la importancia de este tipo de encuentros:
“Nuestros pueblos tienen derecho a decidir qué modelo de desarrollo quieren. Y lo que quieren es tierra para producir, no para especular”, señalaron.
Una visión alternativa para el desarrollo rural.
IU defendió en Bujalance un modelo de desarrollo rural centrado en la producción agrícola, el relevo generacional, la democratización del acceso al agua y la soberanía energética, frente a la acumulación de recursos en manos de grandes empresas. Enrique Santiago llamó a organizarse en el territorio y a conectar la lucha parlamentaria con las demandas del mundo rural:
“No se trata de estar en contra de las renovables, sino de poner orden y justicia en su despliegue. Porque ni el sol ni la tierra pueden seguir en manos de unos pocos”.
IU concluyó el acto comprometiéndose a hacer seguimiento de los conflictos abiertos en la comarca, a elevar propuestas desde los ayuntamientos hasta el Congreso y a seguir construyendo alianzas con el tejido social para que el campo andaluz no quede abandonado a su suerte.