miércoles, 28 de noviembre de 2018

Lopera muestra su repulsa hacia la violencia machista.

Personas asistentes a esta jornada conmemorativa. Foto: Antonio Marín.
Lopera mostró su repulsa contra la violencia machista. Hoy ha tenido lugar el Acto conmemorativo en la Casa de la Tercia en recuerdo de las víctimas de violencia de género durante el año 2018 con reparto de lazos, lectura del Manifiesto y lectura de la Carta ganadora del concurso de cartas celebrado en el I.E.S. "Gamonares" para el día contra la Violencia de Genero. El ganador del certamen fue el alumno Manuel Bueno Uceda.
El acto estuvo presidido por la alcaldesa de Lopera, Isabel Uceda, y por la concejala de la Mujer e Igualdad, Carmen Torres. Asimismo, en la fachada del Ayuntamiento se colocó una gran pancarta en recuerdo a las mujeres víctimas de la violencia machista.
Para finalizar la jornada se desarrolló un Taller de psicología con la psicóloga y sexóloga Carmela Cobo Soto donde se trataron los siguientes temas: "Violencias de las que no hablamos", ¿Qué es la violencia hacia las mujeres? y Análisis de los diferentes contextos donde se produce la violencia hacia las mujeres que a fuerza de normalización no somos capaces de detectar.

La violencia de género sigue siendo una lacra social que día a día va sumando víctimas a una cifra que cada vez duele más. Acabar con la violencia que sufren las mujeres debe ser una responsabilidad compartida por las administraciones públicas, que tienen la obligación de liderar esta lucha y garantizar la protección y la atención de quienes sufren la violencia machista, las mujeres y sus hijas e hijos. Pero también necesitamos la implicación de la sociedad, puesto que la eliminación de la violencia de género precisa una posición decidida de rechazo de todas las personas.
La violencia contra mujeres y niñas es una de las violaciones de los derechos humanos más extendidas, persistentes y devastadoras del mundo actual sobre las que apenas se informa debido a la impunidad de la cual disfrutan los perpetradores, y el silencio, la estigmatización y la vergüenza que sufren las víctimas.
En forma general, la violencia se manifiesta de forma física, sexual y psicológica e incluye:

  • violencia por un compañero sentimental (violencia física, maltrato psicológico, violación conyugal, femicidio);
  • violencia sexual y acoso (violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero, acoso cibernético);
  • trata de seres humanos (esclavitud, explotación sexual);
  • mutilación genital, y
  • matrimonio infantil.
Para mayor clarificación, la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer emitida por la Asamblea General de la ONU en 1993, define la violencia contra la mujer como “todo acto de violencia que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o sicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada.”
Los efectos psicológicos adversos de la violencia contra las mujeres y niñas, al igual que las consecuencias negativas para su salud sexual y reproductiva, afectan a las mujeres en toda etapa de sus vidas. Por ejemplo, las desventajas tempranas en materia de educación no solo constituyen el obstáculo principal para alcanzar la escolarización universal y hace cumplir el derecho a la educación de las niñas, luego también le restringe el acceso a la educación superior a la mujer y limita sus oportunidades de empleo.
Aunque todas las mujeres, en todas partes del mundo, pueden sufrir violencia de género, algunas mujeres y niñas son particularmente vulnerables, ejemplo de ellas son las niñas y las mujeres más mayores, las mujeres que se identifican como lesbianas, bisexuales, transgénero o intersex, las migrantes y refugiadas, las de pueblos indígenas o minorías étnicas, o mujeres y niñas que viven con el VIH y discapacidades, y aquellas en crisis humanitarias.
La violencia contra la mujer sigue siendo un obstáculo para alcanzar igualdad, desarrollo, paz, al igual que el respeto de los derechos humanos de mujeres y niñas.
Cuando una mujer sufre maltrato debe llamar al teléfono 016 y al Teléfono de Información a la Mujer (900 200 999). Se ofrecen servicios especializados y gratuitos como la atención psicológica y jurídica, los centros de acogida y el apoyo sociolaboral. Los recursos se han reforzado para adaptarse a las necesidades detectadas, como el incremento de la violencia en edades tempranas, ante el cual el IAM ha lanzado un programa de atención a víctimas adolescentes, además de ampliar al ámbito municipal la atención psicológica a menores hijos e hijas de mujeres víctimas.
 
Distintos momentos de esta jornada conmemorativa. Fotos: Antonio Marín.