El 112 recomienda que los juguetes que se adquieran en Navidad sean seguros. Foto: Junta de Andalucía. |
El teléfono de emergencias de la Junta destaca que la seguridad comienza en la adquisición y subraya la importancia de cuidar la selección y compra de estos artículos infantiles, al tiempo que recuerda que deben escogerse siempre en función de la edad del menor para garantizar la seguridad durante su uso.
El 112 recuerda que hay que verificar antes de la compra que el juguete seleccionado tenga impreso la marca ‘CE’ de forma indeleble, visible y legible. Esta etiqueta garantiza en todo momento que el fabricante cumple la normativa de seguridad establecida por la Unión Europea, informando de su funcionamiento y de las situaciones de riesgo que puede entrañar un uso inadecuado. Los distribuidores y productores están obligados a cumplir sus requisitos en cuanto a sus propiedades mecánicas y composición química.
Los juguetes que carezcan de estas especificaciones no tienen suficientes garantías de seguridad, por lo que debe evitarse su adquisición. También hay que asegurarse de que aparezca impreso el nombre del fabricante del producto y que tenga las instrucciones de uso en español.
Para los menores de tres años no deben comprarse juguetes que tengan piezas desmontables. Por ello, la normativa de seguridad vigente para los juguetes destinados a niños de menos de tres años no permite que estos tengan piezas pequeñas o separables, como sucede en fichas de juegos de mesa, canicas o juguetes con partes extraíbles. De ahí que el centro de coordinación recomiende no dejarse seducir por la publicidad comercial y verificar esta circunstancia antes de comprarlo para garantizar de este modo su plena seguridad.
La supervisión es un elemento imprescindible para la seguridad.
El 112 destaca que leer las advertencias e instrucciones de uso no es una pérdida de tiempo sino una inversión en seguridad, por lo que se deben leer atentamente. En muchos casos ofrecen información sobre si entrañan algún riesgo especial, como el hecho de que no sean convenientes para menores de tres años, que estén destinados únicamente para mayores de diez o que deban usarse bajo la vigilancia de un adulto.
El artículo de juego debe tener siempre una calidad apropiada, por lo que es preferible acudir a centros especializados. Es recomendable, añade el teléfono único europeo de emergencias, que el objeto elegido no tenga apariencia de comida, que no tenga piezas que se desprendan fácilmente para evitar incidentes, sobre todo con bordes cortantes o trozos que se astillen, y que no sean de materiales pintados o barnizados.
Durante el uso del juguete, se recomienda extremar la atención para aquellos artículos destinados a menores de tres años, al ser una etapa en la que el niño puede tragarse piezas y ello conlleva riesgos de asfixia, corte o intoxicación. No hay mayor elemento de seguridad que la supervisión de un adulto.
El 112 insiste en que no siempre se pueden eliminar todos los riesgos cuando un niño juega o manipula un juguete, por lo que es vital educarlos en el riesgo, enseñándoles a evitar o minimizar posibles incidentes, y revisando periódicamente el estado de los mismos y su entorno de juego.
El centro de coordinación pretende con estos consejos contribuir a preservar el juego como una de las actividades más significativas de la infancia al facilitar a los niños tomar conciencia de sí mismos y del mundo que los rodea. Los juguetes facilitan el desarrollo de la personalidad, el proceso de socialización, desarrollo afectivo, motor e intelectual, por lo que debe hacerse siempre en condiciones de idoneidad, seguridad y responsabilidad para los menores, recuerda el 112 a padres y educadores.