Campos de olivar en Lopera. Foto: Antonio Marín. |
El Gobierno de Andalucía y las organizaciones agrarias
representadas en la Mesa de Interlocución (Asaja, COAG, UPA y Cooperativas
Agroalimentarias de Andalucía) han acordado emitir un comunicado de prensa
conjunto para mostrar su total rechazo ante el inadmisible e injusto recorte
del 9% de las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) propuesto por la
Comisión Europea para el periodo 2021-2027, máxime en unos momentos de pérdida
de rentabilidad en las explotaciones agrícolas y ganaderas.
Andalucía, como primera comunidad gestora de estos fondos
imprescindibles para el presente y futuro del sector agrario, va a pedir al Ministerio
de Agricultura, Pesca y Alimentación formar una alianza conjunta en defensa de
una PAC fuerte, frente a un descenso de estos fondos que supondría una pérdida
de 1.160 millones de euros para la comunidad andaluza, en torno a 160 millones
por año. Esto supone una bajada de casi el 10% respecto a lo que actualmente
ejecuta Andalucía por año de los fondos de la PAC.
En un contexto de crecimiento de los presupuestos europeos,
resulta incomprensible que las ayudas de la PAC sufran tan injustificado recorte.
Pero lo que resulta aún más incoherente y desolador es que la UE no muestre su
total apoyo al sector agrario de los países miembros, después del
extraordinario esfuerzo que están realizando los agricultores, ganaderos y la
agroindustria europea durante la pandemia por la Covid-19, para garantizar el
abastecimiento de alimentos de calidad, sostenibles, saludables y a un precio
asequible para el consumidor.
Además, el campo andaluz, que ha sido colchón en periodos de
crisis para miles de familias andaluzas y volverá a serlo en estos tiempos
marcados por el impacto del Covid, juega un papel vital en la fijación de la
población en las zonas rurales. Sin duda, este es un argumento más para
subrayar la importancia de unos fondos comunitarios cuya rentabilidad social y
económica no tiene comparación.
El agro andaluz ha demostrado a lo largo de todos estos años
una capacidad extraordinaria para aprovechar cada céntimo de euro de la PAC
para avanzar en la modernización, en el uso de tecnología de vanguardia, en la
producción de alimentos de la máxima calidad con técnicas cada vez más
respetuosas con los recursos naturales y en la sostenibilidad social y
medioambiental de una actividad que es esencial y estratégica para España y,
especialmente, para Andalucía.
Precisamente, los recortes planteados por la CE en la
Política Agraria Común obstaculizarían esta apuesta decidida del sector en
Andalucía por una agricultura y ganadería comprometida con la lucha contra el
cambio climático y la creciente tecnificación del campo. No se pueden pedir más
esfuerzos, como se contempla en la estrategia ‘De la granja a la mesa’, cuando
se reducen los recursos para alcanzar los objetivos. La agricultura competitiva
no está reñida con la sostenibilidad.
Por todo ello, desde Andalucía proponemos la conformación de
una alianza leal y fuerte con el Ministerio de Agricultura, Pesca y
Alimentación, que dirige el Sr. D. Luis Planas, para defender los intereses del
campo español y andaluz ante la Unión Europea. En este sentido, tendemos la
mano para plantear alternativas a la CE que no supongan mermar las
posibilidades de crecimiento del sector agrario, sino todo lo contrario, que
nos fortalezcan para seguir adelante en la necesaria transformación digital y
transición ecológica.
Por último, solicitamos al Gobierno de España que defienda
con decisión el futuro del sector agrario en la próxima cumbre de la Unión
Europea del 18 de junio, una actividad estratégica que supone para Andalucía el
11% del PIB y el 10% del empleo.