Como marca fielmente la tradición muchos fueron los vecinos de Lopera los que acudieron a la convocatoria de la Parroquia, provistos con sus animales de compañía y mascotas para que el párroco de la localidad, Manuel Casado Huertas, rociara sobre los animales el agua bendita.
Previamente, se celebró una santa misa en honor a San Antonio Abad. En total fueron unos sesenta animales los que se concentraron en el interior de la iglesia (conejos, gatos, perros, pájaros, etc.). Un acto singular y característico, que cada año cumple con la tradición. Más fotos en Facebook y Twitter. Haz clic sobre las imágenes para ampliarlas.