La gratuidad de libros de texto se desarrolla en régimen de préstamo. Foto: Junta de Andalucía. |
Más de 946.000 alumnos y alumnas de enseñanzas obligatorias escolarizados en centros docentes sostenidos con fondos públicos se beneficiarán el próximo curso 2018/19 del programa de gratuidad de libros de texto.
El próximo curso escolar se renovarán de forma
completa los libros de 1º y 2º de Formación Profesional Básica, así
como los libros correspondientes a 1º y 2º de Educación Primaria, que se cambian todos los años por las características de estos cursos.
Como novedad, el próximo curso se incrementará la dotación específica para el alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo que se establece en 136 euros, equiparándose así con la cuantía máxima asignada a 1º y 2º de Educación Primaria.
Las familias cuyos hijos accedan a estos cursos recibieron
en el mes de junio un cheque libro y la relación de libros de texto
correspondientes para su canje en la librería de su elección. En los
niveles que no se contempla la renovación de los libros de texto, la
Consejería ha establecido un porcentaje de renovación de un 10%.
La consejera de Educación, Sonia Gaya,
ha señalado que el programa de gratuidad de libros de texto es una de
las iniciativas que mejor identifican la apuesta del Gobierno andaluz
por una educación pública en igualdad de oportunidades.
Este programa, que se puso en marcha en 2005, está
dirigido a todo el alumnado escolarizado en Primaria y Secundaria
Obligatoria de los centros docentes sostenidos con fondos públicos, es
decir, tanto públicos como concertados. Desde el comienzo de su implantación, ha atendido a unos 10,6 millones de alumnos con una inversión de más de 706 millones de euros.
La gratuidad de los libros de textos es un derecho
reconocido en el Estatuto de Autonomía y respaldado por la Ley 17/2007,
de 10 de diciembre, de Educación de Andalucía.
El sistema se desarrolla en régimen de préstamo. Los
libros son propiedad de la administración educativa y permanecen, una
vez concluido el curso académico, en el centro donde el alumno haya
estado escolarizado para que puedan ser utilizados por otros compañeros
en años sucesivos. Gracias a esta iniciativa, las familias andaluzas se benefician de un ahorro medio de en torno a 200 euros por alumno y curso.
Pero además del apoyo económico que supone a las familias,
el objetivo de este programa es inculcar al alumnado desde el ámbito
educativo y familiar la importancia de cuidar el material escolar y a
ser responsable de la inversión realizada en su educación.