Los medicamentos se han encarecido según Facua. |
La mitad de los medicamentos que el
sistema público andaluz dejó de financiar en 2012 han encarecido su
precio en estos cinco años, llegando incluso a triplicarlo en algunos
casos. FACUA-Consumidores en Acción alertó en 2012 de que ésta sería la
consecuencia del medicamentazo del Gobierno de Rajoy, lo que provocó que el Ministerio de Sanidad amenazara con ilegalizarla con el absurdo argumento de que no tenía derecho a posicionarse sobre cuestiones de sanidad pública.
Cinco años después de que el Gobierno desfinanciara 320 fármacos y
que pasara a ser el usuario el que corría con su coste completo, el
diario Público
informa de que el precio de 175 de ellos ha aumentado, incluso en 65
casos han llegado a duplicarse o triplicarse. Sólo un medicamento ha
bajado su precio, 138 lo ha mantenido y 6 han desaparecido de la lista,
dejando paso a la entrada de otros 5 medicamentos que antes no figuraban
en la lista.
Fortasec, para tratar la diarrea, ha subido en estos cinco años un
216%, al pasar de 1,89 a 5,98 euros (impuestos incluidos) en su envase
de 10 cápsulas; mientras que el Daflon, para las insuficiencias venosas
ha aumentado un 131% en su caja de 30 comprimidos, al pasar de 4,40 a
10,18 euros, según el diario.
Uno de los casos más graves es el de el jarabe para la tos Mucosan
para adultos, que ha elevado su precio un 335%, de los 2,06 a los 8,96
euros.
Además de la subida de precios, FACUA advirtió también de otros efectos negativos del medicamentazo,
como que se recetaran a modo de sustitución fármacos que sí estuvieran
financiados, indicados para dolencias más graves y generalmente más
caros. Inlcuso, que los usuarios tiendan a la automedicación al dejar de
acudir al médico.
Además, numerosos ciudadanos dejarán de ir a la consulta médica y
puede que opten por medicarse ante síntomas menores, algo que no sólo
los agrava, sino que puede provocar además que patologías más graves
pasen desapercibidas.
El criterio para dejar de financiar medicamentos que impuso el Ejecutivo de Mariano Rajoy en el Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de abril, era
"que el principio activo cuente con un perfil de seguridad y eficacia
favorable y suficientemente documentado a través de años de experiencia y
uso extenso", junto a que estén "indicados en el tratamiento de síntomas menores".
La asociación ya alertaba durante el periodo de trámite de audiencia
de esta ley de que medidas similares llevadas a cabo por gobiernos
anteriores, tanto en España como en otros países, no habían provocado el
ahorro previsto.
De hecho, según Público, el gasto sanitario público se fue
reduciendo de los 12.296 millones de euros en 2011 a los 10.391 de 2014,
para subir de nuevo y alcanzar los 15.640 millones en 2017.
Señala además que sólo el gasto derivado de recetas asumidas por la
sanidad pública (sin la farmacia hospitalaria) aumentó en más de 500
millones entre 2014 (9.954) y 2016 (10.481) mientras el acumulado de
9.825 en noviembre apunta a que la cifra final rondará los 10.800, mil
por encima de los 9.769 que la exministra Ana Mato admitió al cierre de 2012 tras un descenso del 12,2%.
FACUA señala que todas estas medidas no buscan un ahorro, sino que
son un paso más del proceso de desmantelamiento de la sanidad pública.
Una consecuencia más que se suma a la privatización de hospitales en
varias comunidades autónomas, el copago, que incluye la eliminación de
la gratuidad de los fármacos para los pensionistas, y la negativa a
prestar asistencia a los inmigrantes que al no lograr un empleo no
pueden conseguir permiso de residencia.