jueves, 7 de junio de 2018

Salud activa el Plan de Prevención de los Efectos de las Altas Temperaturas para evitar golpes de calor en personas vulnerables.

Una imagen del Pilar Viejo en Lopera. Foto: Antonio Marín.
La Consejería de Salud ha activado este mes de junio y hasta el 15 de septiembre el Plan Andaluz de Prevención de los Efectos de las Temperaturas Excesivas sobre la Salud, dirigido especialmente a la población más vulnerable, como son las personas mayores de 65 años, pacientes crónicos, personas con trastorno mental grave, menores de 4 años (especialmente lactantes) y personas que trabajan o realizan actividad física expuestas al sol.
Para la secretaria general de Salud Pública y Consumo de la Consejería de Salud, Josefa Ruiz, con este Plan se busca evitar el “agravamiento de pacientes con patologías crónicas” y que no se produzcan golpes de calor.
Este Plan de prevención se basa en la vigilancia, control y seguimiento de la población de riesgo, con la identificación de las personas más vulnerables a las altas temperaturas y con la coordinación efectiva entre las diversas instituciones y organismos implicados (servicios sociales, centros sanitarios, residencias, organizaciones de voluntariado, 112, etc.).
Así, desde los centros de atención primaria se ofrece información a la población general y se trabaja en la identificación de los pacientes de riesgo para su inclusión en el plan de seguimiento telefónico que realiza Salud Responde. Además, se intensifican las visitas domiciliarias para monitorizar los signos y síntomas relacionados con el calor y proporcionar consejos para evitar y controlar los efectos del aumento de las temperaturas. Estas visitas y el seguimiento de telecontinuidad se realizan también a pacientes tras su alta en los centros hospitalarios.
Ruiz ha destacado que hay que tener “especial cuidado” con las personas mayores cuyas viviendas no están acondicionadas para hacer frente a las altas temperaturas o aquellas que viven solas, al igual que con los niños menores de 4 años y lactantes “porque su temperatura corporal se eleva más rápido y carecen de la suficiente capacidad de sudoración” para eliminar el calor.
Las personas identificadas como población de riesgo son, en su mayoría, mayores de 65 años, pacientes frágiles que viven solos, cuyo estado de salud está debilitado por padecer alguna patología crónica de alta morbilidad (insuficiencia cardiaca, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, demencia, trastorno mental grave, insuficiencia renal, obesidad excesiva, hipertensión arterial o diabetes mellitus) o que tomen un medicamento que pueda influir en la adaptación del organismo al calor (psicotropos, antidepresivos, hipotensores y diuréticos).
Su seguimiento permite identificar las situaciones y problemas del paciente e interconectar a las enfermeras gestoras de casos, enfermeras de familia y profesionales de Salud Responde, así como poner en marcha los mecanismos de control y actuación necesarios para minimizar los efectos de las altas temperaturas. 
Hasta el momento, se han identificado a 2.746 personas en situación de vulnerabilidad, cifra que el año pasado al final del verano alcanzó las 13.263 personas –un 32% más que el año anterior-. Salud Responde realizó el seguimiento de estas personas con un total de 16.549 llamadas –aproximadamente el doble de las realizadas durante el mismo periodo en 2016-. Asimismo, entre junio y septiembre del año pasado se incluyeron a 6.021 personas en el programa de seguimiento domiciliario y telecontinuidad que se hace cuando un paciente frágil es dado de alta en un centro hospitalario andaluz.
En la provincia de Jaén se identificaron como pacientes de riesgo el año pasado a 949 personas y Salud Responde realizó el seguimiento a través de 3.153 llamadas.
A través de la App de Salud Responde, que tienen descargada casi 2,3 millones de personas en Andalucía, también se pueden consultar consejos para convivir con el calor de forma saludable y también acceder a las previsiones de temperaturas. Los usuarios pueden consultar de forma gratuita las previsiones de temperaturas para cada una de las provincias andaluzas y recibir notificaciones mediante el servicio de mensajería de la App sobre cualquier cambio o activación en los niveles de alerta establecidos.
Igualmente, también se remiten instrucciones y recomendaciones a profesionales de los centros residenciales dependientes de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, que reciben información sobre el uso y conservación de medicamentos, medidas preventivas y protocolos de actuación ante la aparición de sintomatología relacionada con el calor.
Además, casi 215.752 usuarios del Servicio de Teleasistencia de la Junta de Andalucía tendrán acceso a la información y recomendaciones sobre el calor. El pasado verano, desde este servicio se realizaron 16.804 llamadas de control y seguimiento de los usuarios en la provincia de Jaén.
Josefa Ruiz ha recordado las recomendaciones básicas que la población debe tener en cuenta ante la llegada del verano y las altas temperaturas, como son evitar la exposición durante las horas más fuertes de sol, salir con protección (tanto con ropas ligeras y de color claro, y sombreros como con protección solar), ventilar las estancias, bajar las persianas y cerrar las puertas durante las horas de temperaturas más elevadas, mantener un buen nivel de hidratación bebiendo mucha agua, conservar adecuadamente los alimentos, moderar los ejercicios que exijan mucho esfuerzo físico en las horas centrales del día, etc.