La talla de Jesús Amarrado a la Columna por las calles de Lopera. Foto: Antonio Marín. |
A la hora de la procesión el cielo se abrió y permitió la salida de la procesión de Jesús Amarrado a la Columna. La lluvia que había hecho acto de presencia a lo largo del día remitió a la hora fijada.
Majestuoso
e inquieto se mostró Jesús Amarrado a la Columna en su salida de la
Ermita de Jesús en la noche del Martes Santo. Numerosas personas se
agolpaban en torno a la lonja de Jesús para recibir a una de las
cofradías con más tradición de Lopera: la de Nuestro Padre Jesús
Nazareno.
No era de
extrañar el ímpetu con el que los hermanos de esta cofradía se abrían
camino por las calles de Lopera al paso marcado por la Banda de Cornetas y Tambores La Fusión (Lopera-Marmolejo).
El paso
procesional recorrió la Carrera Oficial, con la
tribuna situada en la Plaza de la Constitución. El trono de Jesús
Amarrado a la Columna era testigo de este hecho puntual.
Esta
procesión destacó por su sencillez y sobriedad. Los costaleros
demostraron su saber hacer por diversos puntos de la localidad, en una
noche especial donde se vivieron momentos de muchísima
emoción y de no menos fervor.
La Cofradía de Nuestro
Padre Jesús Nazareno abrió un esplendoroso Martes Santo que derrochó en
las calles el cariño y la devoción de los loperanos.
Las
procesiones continuarán este miércoles santo, a partir de las 23 horas,
con la salida desde la Iglesia Parroquial del Vía Crucis de Silencio y
Penitencia. Haz clic en las imágenes para ampliarlas. Más fotos en Facebook y Twitter.