martes, 19 de marzo de 2024

Un total de 122 vehículos, denunciados por la DGT durante la campaña provincial de control del uso del cinturón y Sistemas de Retención Infantil.

Un vehículo circula por la travesía de Lopera. Foto: Antonio Marín.

La Dirección General de Tráfico (DGT), a través de su Jefatura Provincial, ha interpuesto un total de 122 denuncias a vehículos durante la campaña provincial de control del uso del cinturón de seguridad y de los Sistemas de Retención Infantil (RSI). Este dispositivo especial de vigilancia se ha desarrollado en las carreteras de la provincia entre los días 11 y 17 de marzo y ha permitido controlar un total de 17.674 vehículos.

Para ello, la Jefatura Provincial de Tráfico ha contado con la colaboración de los ayuntamientos de la provincia para el control de vehículos en las zonas urbanas de sus respectivos municipios. De esta manera, agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, además de los policías locales que se han sumado a la campaña, vigilarán el correcto uso de este dispositivo de seguridad.

Conviene recordar que la Ley de Tráfico y Seguridad Vial ha elevado a 4 los puntos que se pierden por no utilizar el SRI adecuado o no se hace de la manera correcta, del mismo modo que se ha hecho con el no uso del cinturón de seguridad.

Si llevar el cinturón puesto reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente, en el caso de los niños, la utilización de los Sistemas de Retención Infantil es aún más importante, ya que los datos demuestran que 9 de cada 10 lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado los sistemas de retención obligatorios. Además, en caso de accidente, las lesiones se reducen hasta en un 75% con un uso adecuado de los mismos.

La DGT recuerda, una vez más, que el cinturón es imprescindible también en los asientos traseros, ya que, en caso de impacto frontal, por ejemplo, la probabilidad de que un ocupante de esos asientos golpee mortalmente a otro pasajero de delante puede ser hasta 8 veces mayor.

Sin cinturón de seguridad, a 80 km/h los pasajeros de atrás no tienen ninguna forma de sujetarse y son proyectados con los de delante con una fuerza equivalente al golpe de una bola de 1.200 kg a 10 km/h, lo que podría matar o lesionar gravemente a los ocupantes de los asientos delanteros.