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| Francisco Reyes. Foto: Diputación de Jaén. |
El
Diputado y Portavoz de IU en la Diputación Provincial de Jaén, Miguel M. García, ha
lamentado que la oposición al pacto entre PSOE y Ciudadanos por parte de
Francisco Reyes (Presidente de Diputación) venga únicamente como
consecuencia de la supresión de las diputaciones provinciales.
En opinión de Miguel M. García, el pacto recoge múltiples puntos regresivos en derechos sociales y laborales, que continúan con la senda iniciada por el propio PSOE en 2008 y seguida por las medidas del gobierno del PP. Especialmente “sangrante” es el acuerdo para una provincia como Jaén, donde la crisis dura ya décadas y no hay “luz al final del túnel”.
En opinión del diputado de la coalición, el “no” del Presidente de Diputación debería venir como consecuencia de la no inclusión de un Plan de Reindustrialización para la provincia, o de la no inclusión de una nueva política agraria para nuestro olivar, o de la subsanación del déficit de infraestructuras y comunicaciones que sufrimos en esta tierra y condiciona tanto nuestro sector turístico como el comercial.
La apuesta de IU pasa por fomentar las mancomunidades al objeto de prestar servicios e infraestructuras que por su alto coste y complejidad impidan ser desarrolladas por población individualmente.
En opinión de Miguel M. García, el pacto recoge múltiples puntos regresivos en derechos sociales y laborales, que continúan con la senda iniciada por el propio PSOE en 2008 y seguida por las medidas del gobierno del PP. Especialmente “sangrante” es el acuerdo para una provincia como Jaén, donde la crisis dura ya décadas y no hay “luz al final del túnel”.
En opinión del diputado de la coalición, el “no” del Presidente de Diputación debería venir como consecuencia de la no inclusión de un Plan de Reindustrialización para la provincia, o de la no inclusión de una nueva política agraria para nuestro olivar, o de la subsanación del déficit de infraestructuras y comunicaciones que sufrimos en esta tierra y condiciona tanto nuestro sector turístico como el comercial.
La apuesta de IU pasa por fomentar las mancomunidades al objeto de prestar servicios e infraestructuras que por su alto coste y complejidad impidan ser desarrolladas por población individualmente.
Eliminando de forma progresiva las
diputaciones provinciales, que son un “cementerio de elefantes” de los
grandes partidos, donde su opacidad y falta de un sistema democrático de
funcionamiento las hace idóneas como maquinaria de creación de redes
clientelares. De ahí, que en el Pleno de Diputación del otro día, tanto PP
como PSOE se pusieran de acuerdo frente a IU en la defensa de estas
administraciones como instrumento de gestión de los municipios pequeños.